Isla a isla, cuento a cuento, así se construye este camino flanqueado de historias.


Yolanda Ortega

Yolanda Ortega

Tras la lectura del mismo, la primera imagen que me vino a la cabeza fue la de una pieza de piano tocada a seis manos.  Después me di cuenta que era una sinfonía en la que había voces, sonidos y un puñado de historias sabrosas, de las que alimentan la imaginación y los sueños.  Tres voces, a cada cual más hermosa, Sandra Franco, Daniel Martín y Juan Carlos Saavedra,  que poseyendo cada una su timbre y tono personal, son capaces de acoplarse de tal manera que ninguna desentona y nos obligan a  releer el índice para saber quien firma cada una de ellas.  Hecho que es de agradecer y que da cuenta del logro de la obra, del trabajo y buen hacer, casi artesanal, que hay detrás. Un trabajo que se engarza con las ilustraciones de Lourdes Navarro y que se completa con un regalo para los lectores, los textos silbados. Quizá un exotismo para los ajenos a esta forma de comunicación.  Un presente casi mágico para todos, valioso y reconocido por la UNESCO, en 2009,  como patrimonio universal inmaterial de la Humanidad.

Son muchos los títulos que nos vienen a la mente de novelas, relatos, cuentos que hablan de un recorrido literario por la islas Canarias.  Una obra en la que la palabra, la literatura, la tradición, los cuentos y las historias se convierten en el hilo que de forma invisible va hilvanando en un tapiz invisible las diferentes islas, quedando cada una de ellas caracterizada por su relato, salvándose del tópico gracias a la singularidad de las historias y a la originalidad de los autores.

Una lectura que hará disfrutar a chicos y grandes, en la que los valores del respeto a la naturaleza, la compasión, el respeto a la diversidad, el humor, la alegría, los sueños tomarán cuerpo en los diferentes personajes y que de seguro cuando cerremos el libro se nos habrán quedado prendidos al corazón.

Reseña realizada por Yolanda Ortega Moral